Técnica de construcción de la Chalupa
Superaciones en la construcción de la chalupa ballenera
Las técnicas empleadas para la construcción en chocolate de una chalupa ballenera de 8 metros de eslora 2 de manga han sido el verdadero reto. Desde el principio se ha trabajado en terreno desconocido, por un lado Albaola nunca había trabajado con una embarcación de este material y lo que ello conlleva para su manipulación, y por otro lado, los artesanos chocolateros y pasteleros nunca se habían enfrentado a un trabajo en chocolate de esas dimensiones y que debiera flotar el 1 de junio.
Aunque hace 2 años construyeron la réplica en chocolate del Guernica de Picasso a tamaño real, la técnica fue totalmente diferente. En esa ocasión fue un trabajo plano con multitud de plantillas.
El reto de los chocolateros y pasteleros
Tras barajar posibles técnicas de construcción, el equipo de pasteleros de 5 provincias (Guipúzcoa, Vizcaya, Álava, Navarra e Iparralde) resolvió realizar el casco de la chalupa de una sola pieza, para ello necesitaban colocar la réplica de madera boca abajo y así poder ir colocando el chocolate, para luego extraer el molde y obtener el casco de la embarcación.
El reto de Albaola Itsas Kultur Faktoria
Una vez los chocolateros cavilaron la mejor forma de hacer el casco de la embarcación, los carpinteros de Albaola tuvieron que ponerse manos a la obra y aterrizar la idea. Crearon sobre el molde una estructura de madera que los pasteleros reforzaron con una malla metálica y la forraron con un plástico (para facilitar su posterior desmolde).
Además, a los chocolateros se les presentó otro reto, plantear cuál era la mejor manera de trabajar el chocolate para construir un casco lo suficientemente fuerte. Decidieron elaborarlo con chocolate plástico, chocolate que mezclado con glucosa en unos porcentajes y a unas temperaturas concretas le confiere elasticidad y lo vuelve maleable y además, favorece que a temperatura ambiente se endurezca. Para lograr esa temperatura Salva Industrial cedió dos hornos que se instalaron en el astillero durante todo el proceso.
Durante aproximadamente 25 días se ha estado cubriendo la chalupa de madera con el chocolate plástico, aproximadamente 1.000 kilos de chocolate fundido aportado por IRCA y Almacenes Usabiaga.
El momento más delicado
Un momento crítico fue el dar la vuelta a la chalupa y el desmolde. Trabajo que realizaron los carpinteros de Albaola con gran maestría pero no sin nervios de enfrentarse a algo desconocido.
El acto fue a puerta cerrada ya que no se podía garantizar la seguridad de las personas que se acercaran a ver tremenda hazaña, pero pudimos grabarlo.
A partir de este momento, queda reforzar y decorar la parte interior para la botadura del 1 de junio a las 14:00 en Albaola Itsas Kultur Faktoria.
La pregunta en la cabeza de todos es, ¿flotará?